martes, 16 de agosto de 2011

La amistad

Y un joven dijo: “háblanos de la amistad”
Y él respondió
“vuestro amigo es la respuesta a vuestras necesidades.
El es el campo que sembráis con amor y
cosecháis con agradecimiento.
El es vuestra mesa y el fuego de vuestro hogar.
Porque os acercáis a él con vuestra hambre,
y le buscáis sedientos de paz.


Cuando vuestro amigo os manifieste su pensamiento,
no temáis el “no” en vuestra cabeza, ni retengáis el “si”.
Y cuando el permanezca en silencio,
que vuestro corazón no deje de oír su corazón.
Porque en la amistad, todos los pensamientos,
todos los deseos, todas las esperanzas nacen y
se comparten con gozo y sin alardes.
Cuando os alejéis de vuestro amigo, no sintáis dolor.
Porque lo que más amáis en el quizá este mas claro
en su ausencia, igual que la montaña es más clara
desde el llano para el que quiere subirla.
Y no permitáis que haya en la amistad otro interés que
el que os lleve a profundizar en el espíritu.
Porque el amor que no busca más que la revelación de
su propio misterio no es amor, sino una red tendida que
sólo recoge la pesca inútil.


Que lo mejor de vosotros sea para vuestro amigo.
Si ha de conocer el flujo de vuestra marea, que también
conozca su reflujo.
Porque, ¿qué amigo sería aquel que tuvieras que buscaros
para matar las horas? Buscadlo para vivir las horas.
Porque existe para colmar vuestra necesidad,
no vuestro vacío.
Y haced que en la dulzura de la amistad haya riza
y placeres compartidos.
Porque en el rocío de las cosas pequeñas,
el corazón encuentra su alborada y se refresca”

Kahlil Gibrán, 1883-1931.
El profeta (1923)



La amistad……Para mi querido amigo Alan Rogers


Tengo que comenzar esta historia por decirte que llevo tiempo buscándote, extrañando tu amistad, y los buenos tiempos que juntos compartimos.
Creo que nunca te dije lo importante que fuiste en mi vida y talvez por eso te llame miles de veces con el pensamiento, preguntándome donde estarías y si algún día te volvería a encontrar.
Hay personas que cuando las conocemos enseguida nos impactan y cambian nuestras vidas y pensamientos por completo. Mi querido amigo, tú amistad tuvo en mi vida ese efecto, de ti sólo guardo hermosos recuerdos.
De un amigo incondicional que me acompaño durante mucho tiempo, en una época donde encontrar a un buen amigo, que te escuche, te comprenda, te aprecie y te valore por lo que eres, fue para mí como encontrar agua en el desierto.

Alan te he buscando por tanto tiempo, porque necesitaba contarte un cuento, que siendo tú de los pocos que me conocen desde la época del colegio podrías comprender, igual siendo yo un libro abierto. Son pocos los que me conocen tan bien como tú y yo a ti te veo como cuando me veo al espejo.
Tenemos tanto en común, que estoy feliz de tenerte en mi vida de nuevo.

Te busque porque necesitaba de un buen amigo, alguien quien recuerde quien era yo hace muchos inviernos.
Me encanto que me escribieras que “tendremos mucho tiempo para ponernos al día con todo lo referente a nuestras vidas”. Yo no tengo prisa, que son unos días más o menos para contarle mis cuentos, mis historias, mis secretos, al amigo a quien extrañé y busque durante años sin resultados. Hace unos días te pensé y antes de irme a acostar te busque y finalmente te encontré en Internet.
Gracias por no olvidarte de mi, mi querido amigo y por contestar mi mensaje de inmediato y no dejarme esperando más tiempo.
Nunca perdí la fe de encontrarte y me trajiste suerte, pues en el la búsqueda de mi amigo perdido, encontré un tesoro, a mi inspiración, quien me llevo a escribir cuentos.
Muchos años han pasado, como tú bien mencionaste y estoy de acuerdo contigo que es como si el tiempo se hubiese congelado. Tú y yo seguimos siendo los mismos buenos amigos.
Me alegra que tú también estés contento de esta segunda oportunidad que Dios nos dio para continuar nuestra amistad.

Alan, ahora quisiera contarte un cuento,
vayamos al comienzo …………………..

Continuará

1 comentario:

Alan dijo...

Vaya querida amiga aqui me tienes con los ojos llenos de lágrimas escribiendote estas líneas. Stephen Covey dice "Tocar el alma de otro ser humano es caminar por tierra sagrada." Nuestra amistad fue y es exactamente eso: Dos almas tocandose y caminando por tierra sagrada. Gracias querida amiga!!! Gracias!!! Gracias!!! Me encanta todo lo que has escrito hasta ahora y estoy ansioso por leer todo tu cuento, conocer todo el relato... Un gran abrazo querida amiga. Recibe tu y todos tus seres queridos todas las bendiciones del universo. Besos y abrazos. Alan.