lunes, 2 de mayo de 2016

Entre los dedos


Anoche mientras dormía soñé con la vida…
Al principio la vida se me escapaba entre de los dedos.
Eran pequeños granos de arena de diferentes colores.
Uno granos eran de tonos brillantes y vivos; otros eran de tonalidades opacas…
Rápidamente cerré mi mano en puño… No podía perder ni uno solo grano más. 
Seguían escurriéndose entre los dedos de mi mano cerrada.
Intentaba aferrarme fuertemente a ellos. 
Cerraba mi puño con fuerza.
Cuanto más cerraba la mano, más rápidamente se escapaban por entre los dedos. 
Entonces en mi sueño entendí… estaba todo muy claro. 
Abrí mi mano… ya no me importaba perder granos de arena.
La vida es libertad y no la podemos detener… Debemos vivirla.
Cada grano coloreado de arena era una experiencia de vida.
Aquellos que quedaban en mi mano eran experiencias por vivir…
Aquellos que rápidamente eran llevados por el viento eran momentos que no me correspondían experimentar…
Los granos de arena que caían lentamente entre mis dedos eran experiencias ya vividas…
Mi sueño me lo explicaba todo…
Vive intensamente la vida… al igual que los granos de arena, ella se escapa y no puedes aferrarte a ella, simplemente debes vivir, experimentar, aprender, recordar y amar.
Cada experiencia será única e inolvidable.
Seguí durmiendo…
Los granos de arena siguieron escapando por entre mis dedos abiertos pero cada grano que caía dejaba en mi corazón una marca especial con su tonalidad particular…

Madrid, 26 de Marzo 2016.
© Alan M. Rogers Martijena