Haciendo mis sueños realidad.

Hoy no me desperté pensando en el amor, hoy me desperté con una canción en la cabeza y una coreografía en la mente. Que pensándolo bien es como pensar en el amor.

De niña soñaba con bailar y dar clases de baile. Recuerdo invitando a mis primas y amiguitas a la casa de mi abuela a bailar en el patio. Las colocaba en fila y me ponía al frente de ellas y les enseñaba unos pasos al ritmo de la música de Michael Jackson. Mientras algunas niñas jugaban con muñecas  yo daba clases de baile.

Hace un año, este mes de junio, estaba yo bailando al aire libre en Erlangen como estudiante de una escuela de baile dando una presentación en vivo frente a mucha gente. Recuerdo estando nerviosa, pensando ¿que hay si hago el ridículo?, hacia muchos años que no me paraba frente a un publico, para mi sorpresa lo disfrute al máximo y muchos me felicitaron diciendo que mi presentación había sido excelente. ¿Que porque no daba yo clases de baile? Me preguntaron algunas personas y amigas.

Recordé mis sueños de niña y pensé que si pudiere dar clases de baile, ese seria un gran sueño hecho realidad. Comencé a prepararme y decidí ir cuatro veces por semana a la academia a bailar y aumentar mi resistencia, dos horas al día. Tenia un plan, el de inscribirme en el curso de instructora de ZUMBA para sacar mi certificado oficial y poder dar clases. No tenía idea como y donde eran los cursos, no los anuncian por ningún lado. Averigüe con una de las profesoras, que los cursos eran una vez cada cierto tiempo y que siempre estaban llenos con meses de anterioridad y muchas veces son en ciudades grandes y lejanas, no en el pueblo en donde yo vivo. Aquí no hay esos cursos, el corazón se me puso chiquito, pero yo no me rindo. Seguí preparándome y bailando cada minuto libre que tenía, bailando todos los días, hasta en la cocina mientras preparaba la comida, escuchando la música de ZUMBA en el carro y preparando corografías en mi mente. Si algo tengo, es que cuando se me mete una idea en la cabeza, nunca me rindo, mientras dependa de mí y sólo de mí, yo no desisto de llegar y cumplir mis metas para hacer mis sueños realidad.

Finalmente me entere que el 31 de marzo habría una gran fiesta de ZUMBA, de más de 350 personas, donde vendrían instructores oficiales de otras academias y ciudades a presentar sus coreografías y además ese sábado y domingo se dictaría el curso de instructora en un lugar como a media hora de mi casa en auto. Cheque el curso por internet y vi que ya estaba full y no admitían más participantes. Otra vez mi corazón se puso chiquito. Decidí contarle a mis amigas que quería hacer el curso de instructora oficial de ZUMBA, ya que en mi experiencia cuando cuento mis deseos, los amigos, me motivan, me dan ideas de como llegar a la meta y no dejan que se me olvide, ya que me preguntan constantemente: ¿Ya te hiciste instructora de ZUMBA? ¿Cuándo vas a dar las clases de baile?

Le conté a unas amigas que quería irme al otro pueblo donde darían el curso para preguntar si admitían a una más o si me podían informar del siguiente curso disponible y que si no me aceptaban de igual forma asistiría a la gran fiesta de ZUMBA que anunciaban para esa noche después del curso. Para esa fiesta podía ir todo el que se pagara su entrada. Le pregunte a mis amigas de la academia de baile si alguna quería acompañarme a la fiesta esa noche pero ninguna quiso. A algunas les pareció costosa la entrada y para  otras era demasiado intenso bailar ZUMBA tres horas seguidas. Una de las chicas que escuchaba la conversación me dijo, que ni lo intentará, lo de ir al otro pueblo, que al no estar inscrita no me iban a admitir en un curso ya lleno y que seguro tendría que esperar meses hasta encontrar otro curso, que no iba a encontrar ninguna información valiosa y que no merecía la pena echarme ese viaje para nada. Siempre hay gente que te dice que no puedes lograr tus sueños, yo le di las gracias a esa persona, porque ahora tenía más ganas de hacerlo, para demostrarle que si podía. El sábado 31 de marzo, yo me desperté a las seis de la mañana, para alistarme con mi ropa deportiva y estar en el sitio del evento de ZUMBA apenas abrieran. Estaba yo muy nerviosa, pensé lo peor que me puede pasar es que me digan que no aceptan más gente. No, lo peor que me puede pasar es que no logre hablar con la instructora oficial del evento personalmente para averiguar acerca de los cursos. Necesito informarme, hablar con alguien que tenga las respuestas a mis preguntas, ver por mis propios ojos donde son las clases y vencer el miedo de ir en búsqueda de mis sueños.

Llegue al lugar bien temprano, ya veía a otras chicas con sus cuadernos y bolígrafos en mano para anotar las clases, pero por ningún lado a la instructora. Decidí preguntar en la recepción. Le dije a una señora muy amable que buscaba a la instructora, que no estaba inscrita, pero deseaba participar de ser posible ese mismo día en el curso. La señora me sonrió amablemente y me dijo que me llevaría personalmente donde la instructora. ¡Estoy de suerte!, me dije a mi misma, por lo menos no me dijo que me fuera que no podían atenderme. Subimos escaleras y pasamos varias aéreas y salones hasta que llegamos a un salón con espejos, que emoción pensé. La instructora una mujer morena alta, muy bella, me recibió con una sonrisa, yo me sentía como si estuviera ante  una estrella de cine. La instructora, holandesa es una de los cuatro instructoras oficiales de ZUMBA Fitness a nivel de Europa y su trabajo es viajar por diferentes países para dictar los cursos de ZUMBA a futuros instructores en Europa. Yo le conté brevemente mi historia y le dije que no había encontrado un cupo disponible por internet, que mi sueño era el de dar clases y que si por favor me permitía participar en su  curso. Ella me explico con mucho amabilidad que lamentaba no poder aceptarme en su clase porque ya estaba llena de hacía meses y todas las inscripciones deben hacerse por internet, donde te dan un código y una clave secreta para el curso y se imprimen los diplomas con los nombres de los participantes con anterioridad.  

–Si participas en mi clase de hoy no tendré un diploma que entregarte al final del curso, debes inscribirte por internet, chequea hoy mismo. – Me recomendó –Hay un curso en Múnich el 24 de mayo, pero tienes que inscribirte lo más pronto posible antes que se agoten los cupos. – Me miro de arriba abajo y agrego– Veo que tienes la energía y lo que se necesita  para ser una buena instructora, no te rindas.

–Muchas gracias por tú tiempo y tus valiosos consejos y por toda la información, muchas gracias, que lindo haberte conocido personalmente – le dije abrazándola con cariño y despidiéndome de ella sin saber que esa noche la vería de nuevo. Hoy día estamos conectadas por Facebook.

De ahí regrese a Erlangen sintiéndome que había dado un paso enorme hacia realizar mi sueño, me desayune y me fui a bailar ZUMBA de 10a.m. a 11:00a.m. Luego llegue a casa y busque en internet el curso de ZUMBA en Múnich. Ahí estaba en la pantalla, disponible un curso de dos días. Me inscribí, luego de consultarlo con mi esposo, que gracias a Dios me dijo que podía encargarse él sólo de los chicos esos días. En la noche me fui a la fiesta de ZUMBA y  tuve la oportunidad de hablar con la instructora oficial de ZUMBA que esa noche dio una presentación espectacular sobre la tarima. Le dije que ya estaba inscrita para tomar el curso en Múnich y que le agradecía mucho el haberme motivado a hacerlo. La ZUMBA Party esa noche estuvo fenomenal, más de 350 personas bailando y varias escuelas participaron y dieron un show que nunca olvidare.

 El 23 de Mayo me fui a Múnich en tren por tres días (fueron más 3 horas de viaje, un autobús y 3 trenes) y regrese con mi certificado de Instructora oficial de ZUMBA fitness. Estoy feliz de haber ido en búsqueda de mis sueños y haber logrado la meta que me propuse. Perseguir nuestros sueños parece a veces imposible, difícil, toma tiempo, esfuerzo, no es gratis y da miedo enfrentarse a los obstáculos, pero cuando lo hacemos nos da una fuerza increíble, una seguridad, una energía, una felicidad indescriptible y si siempre vale la pena, inténtalo, no te rindas y ve en búsqueda de tus sueños.

¡Ahora ya estoy lista para vivir mi sueño!
Te espero en mis clases de ZUMBA

Johanna Penny

Official ZUMBA fitness Instructor