Yo no supe
que decir. Yo quería hacerlo a él muy feliz no algún día, sino más bien ahora. Quería
escuchar que él era feliz conmigo, así
como yo me sentía feliz con nuestra relación. ¿Problemas de comunicación o
simplemente mal interpretación de las cosas que se dicen? La comunicación es lo
más importante en una relación de pareja. (Seguido por el sexo y el espacio…Mmm
“Sexo en el espacio” me gusta para un cuento) según encuestas en la revista Cosmopolitan
Internacional.
Algún día harás
a un hombre muy feliz – sus palabras se repetían
en mi cabeza una y otra vez
¿Que acaso
puede él predecir el futuro? ¿Cuándo llegara
ese algún día? ¿Sabré reconocer al hombre que debo hacer feliz? – miles de
preguntas en mi cabeza.
¿Será que
el hombre me dirá…?: “Hola, permíteme presentarme: yo soy el hombre al que tu harás
muy feliz”
Hace poco conocí
a un hombre guapo, muy simpático, que me dijo: permíteme presentarme, que todavía
nadie lo ha hecho, mi nombre es.... Para mí desilusión, seguido de su nombre no
dijo nada más, solo me regalo una sonrisa perfecta. (Todas las semanas se
presentan o me escriben mensajes hombres guapos, simpáticos e interesantes. ¿Qué
está pasando? Recordar para invisible)
¿Qué se
necesita para hacer feliz a un hombre?
Es muy fácil
hacer que un hombre se enamore, es como quitarle un dulce a un niño o más bien
es como darle un dulce a un niño y observar como su rostro se ilumina de
felicidad. Hacer feliz a un hombre es
mucho más complejo. Depende de lo que para el signifique ser feliz, de sus
prioridades, de sus fantasías, (¿somos nuestras fantasías?) de su entorno, de
su familia, de sus amigos, de su trabajo, de su educación, de cómo lo hayan
criado en su casa, sus costumbres, si es de los que ven un vaso de agua, medio vació
o medio lleno, pero ignoran el contenido. Si es de los que les gusta la cacería o de los que prefieren que
le sirvan la carne en bandeja de plata. ¡Hacer a un hombre feliz, parece más
bien misión imposible!
Algún día harás
a un hombre muy feliz – en eso pensé cuando escuche “Eres mi felicidad” – dijo tomando mi mano y mirándome
con esos ojos de niñito perdidamente enamorado
!Ay no, yo no
soy tu felicidad! – le respondí, pensando en lo difícil y complicado que es
hacer a un hombre feliz. Yo no quiero difícil ni complicado, yo no quiero
escuchar. Yo quiero sentir. No quiero algún día hacer a un hombre muy feliz, yo
no quiero ser su "hobby", su distracción, su tabla salva vidas, no quiero que su
sol se ponga y se acueste con mi sonrisa. Quiero compartir mi felicidad con él, que encuentre
solito su felicidad y desee compartirla conmigo. Me gustaría que confiara en mí,
en mi capacidad para hacer lo que sea necesario para que ambos podamos ser felices
y sentirnos realizados como individuos, sin esperar que nuestra felicidad
dependa de lo que el otro haga, diga, escriba, sienta o comente por Facebook, PIN o WhatsApp.
Te amo por cómo
me haces sentir, así de simple y des complicado. Te amo, no por lo que me dices
o crees que yo quiero escuchar. (Amo tu voz, tu sonrisa, tus manos cuando toman las mías) Te amo, no porque te necesite para ser feliz,
sino más bien soy feliz y te necesito porque te amo (tu amor me hace bien) y me gustaría regalarte un
poco de mi felicidad, compartirla contigo. Te amo porque te siento en todo el
cuerpo, (pensar en ti me hace estremecer por dentro) te llevo en mi corazón a todos lados donde voy (eres el amor de mi vida y nací para amarte). Te amo porque te preocupa mi felicidad, así como
yo me preocupo por saberte feliz (simplemente te amo y te amare por el resto de mi vida). Confió y tengo fe que algún día encuentres lo que buscas... tu
felicidad y tal vez quieras compartirla conmigo sin condiciones, complicaciones
y sin límites. Hacer feliz a un hombre algún día…
…creo que puedo tacharlo de mi lista de cosas pendientes
1 comentario:
Hacer feliz a un hombre nos es algo fácil. Cómo dijo Donald Trump "Nada es fácil. ¿Quien quiere 'nada'?"
Pude imaginar su cara diciendo "eres mi felicidad"" WOW! Too much :D
Seguiré paseando por aquí
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