De viaje con el amor

Anoche vi una película con Julia Roberts en HBO “Eat Pray and Love” si no la han visto se las recomiendo. Es acerca de una mujer que se siente infeliz, he insatisfecha con su vida y su matrimonio y decide dejarlo todo he irse a hacer un viaje a Italia, la India y Bali en busca de si misma.

Esta mañana, pensando en la película vino a mi mente este cuento.

Hace más de un año, me dijiste que no eras feliz con todo lo que tenías, o en el lugar donde te encontrabas. que no importaba todo lo que tú hicieras por mí o todo lo que me dieras, yo tampoco era feliz a tú lado. Que yo había perdido la capacidad de amar, que yo no podía amar a nadie y que estabas cansado de tantos proyectos y metas, que no querías participar en ninguna de ellas. Me dijiste que yo te tenía agotado emocionalmente y tú ya no veías un futuro a mi lado. Que necesitabas tiempo y espacio.

A mi se me vino el mundo abajo con tus palabras y llore tanto pensando en que momento nos equivocamos tanto, dejamos de ver lo verdaderamente importante. En que momento perdí mi norte, yo me sentía tan culpable por no ser capaz de amarte como te merecías y por no tener un corazón capaz de abrirse para dejarse amar por alguien que me amaba tanto como tú.

Así fue como inicie un viaje, que no me llevo por Italia, por la India o Bali en búsqueda de mi capacidad de amar.

Mi viaje fue mucho más lejos, más allá, más complicado. Empecé por escuchar a mi corazón y sus diferentes latidos. Al principio no entendía nada de lo que me decía y yo estaba muy triste y desesperada, pero al poco tiempo empecé a entender que él quería música y baile para alegrar sus días. Luego me pidió que me rodeara de gente muy querida y compartiera con ellos mis sentimientos, que me expresara, que dejara de vivir las apariencias de una vida perfecta. Que tenia que sincerarme con migo misma, que yo no podía engañarme a mi misma o a nadie a realmente importante en mi vida.

En mi viaje fui en búsqueda de amigos que me conocieran de toda la vida, que me recordaran como era yo antes, cuando era otra, alguien feliz, como fui antes de perder mi capacidad para amar. Necesitaba  saber si todavía la tenía en el fondo de mi corazón. Si yo poseía un corazón, capaz de latir nuevamente por amor. Me urgía encontrar a alguien que me recordara cuando había sido la última vez que había sido feliz por amor. Inicie una búsqueda y encontré lo que tanto anhelaba y fue como encontrar el más bello de los tesoros. El amor inundo mi corazón y mi mente se llenos de recuerdos hermosos, los más bellos, y tanta felicidad me tumbo y puso mi mundo completo patas arriba, sentí como me estremecía por dentro, como todo temblaba, como el piso se movía, sentía mucho miedo. Mi corazón no paraba de hablar y de cantar canciones de amor, sentía que enloquecía con tantos sentimientos que yo no podía ni siquiera comenzar a entender que estaba sucediendo y me deje caer.

Cuando desperté estaba yo en otro mundo, uno llenos de cuentos, de poemas, de historias, de música y canciones. Ya no tenía miedo de sentir, de abrir mi corazón, él había bajado todos sus muros y quedado al descubierto, al desnudo. Sabía los riesgos, sabía que en cualquier momento podía terminar en el infierno, pero aun así, no me importo, tome los riesgos. Me fui de viaje a Praga para inspirarme, para olvidar un amor imposible, no correspondido, silencioso. Me fui para tomar muchas fotos que hablaran de amor, para enfrentar mi dolor, para alegrarme por volver a sentir amor, para comprar cuadros de arte, para pedir tres deseos sobre un puente y es que mis deseos siempre se cumplen.

Regrese de Praga mas enamorada que antes. Tanto amor me tenía ciega, sorda y muda como la canción de Shakira. No veía yo las señales que estaban por todos lados y que eran tan obvias. No escuchaba tus palabras o lo que me decías, era como escuchar pura estática, como cuando cambias una emisora en la radio que no tiene buena señal. Yo estaba como muda y no me atrevía a preguntar nada que rompiera el hechizo en el que me encontraba y es que se sentía tan bien poder amar y dejarse querer. Yo no quería preguntar y tú no querías contarme nada que pudiese alejarme aun más de ti.

Yo estaba en la casa pero no estaba realmente, estaba ausente, estaba de viaje, de viaje en mi mente y todo el tiempo. Tú lo notaste al poco tiempo y empezaste a preocuparte, pero no te atreviste a tráeme de regreso. Ahora era yo la que pedía tiempo y espacio para seguir mi viaje, tú me dijiste que me tomara todo el tiempo necesario, pero que volviera, que me estabas esperando.

Yo no quería volver, quería continuar viajando, además ¿volver a que? A un mundo vacío y sin amor, aun mundo frio, gris, donde nada es lo que parece. ¿Volver a ti? Para que me recordadas que no era capaz de amar. Cuando pensaba en ti lo que me entraba era un ataque de pánico, me sentía asfixiada, que me faltaba el aire. Te lo dije tantas veces y tú no quisiste escucharme. Me dijiste que a ti no te gustaban los conflictos, que solo querías el amor sin discutir, sin pleitos y sin preocupaciones. Me dijiste que querías paz y silencio.

“Cuando deje de pelear contigo por cosas del amor preocúpate, porque quiere decir que ya no me importas, que dejé de amarte, que me rendí, tire la toalla. Y hasta es posible que este peleando por amor con otro, que si me importa y a quién si le importo.” ¿Anónimo?

Así fue como te complací y deje de pelear contigo, te regale paz, pero no te di mi amor, me lo lleve de viaje conmigo. Fue un viaje muy largo de muchas horas, muchos días. Escribiendo, escribiendo y escribiendo, bailando, bailando y bailando. Cines, salidas, rumbas con las amigas, largas charlas con los amigos, pero nunca en casa cuando tú estabas, para no discutir y darte lo que me pedias, paz y silencio.

Un día me dijiste ¡ya esta bueno ya!, ya no quiero paz o silencio, o espacio ya yo regrese de mi viaje y quiero estar a tú lado. Asunto resuelto, ya todo esta bien, ya que comprendí que eres tú lo que quiero y estoy dispuesto a todo por ti, por tu amor.

¿Las cosas que hacemos por amor? ¿Y que has hecho tu por amor hoy? Me preguntaba constantemente.

Por amor las cosas que hacemos nunca son suficientes, el amor se demuestra no sólo con palabras, pero también con hechos. Somos capaces de todo por amor, de cambiar quienes somos, nuestra esencia, por amor somos capaces de olvidar nuestros valores, de borrar la fina y delgada raya de lo que esta bien y lo que esta mal. Por amor somos capaces hasta de volvernos a enamorar, nos entregamos ciegamente a la pasión en vez de huirle. Por amor enfrentamos nuestros demonios mas terribles y ocultos. Parecería que por amor todo esta dicho, todo esta escrito, todas las canciones románticas de la radio, están ahí para el amor y para quien quiera escucharlas.

Por amor soy capaz de convertirme en volcán, en tsunami, en un puente de hermosas luces, por amor soy capaz de escribir los más hermoso poemas y cuentos de amor. Por amor soy capaz de todo y cualquier cosa hasta de dejar de lado mi orgullo y pedir perdón. Por amor no sé que no haría. Por amor hice tantas cosas. Todos los días acostándome pensando en el amor y levantándome pensando en el amor y por amor, esperando para hacer aún más, porque nada y todo por amor es suficiente.

¿Cuantas veces tienes que decirle a alguien que lo amas, para que deje de preguntártelo o si mismo si es cierto que lo amas?

¿Cuantas veces tienes que demostrarle a alguien que lo amas, para que empiece a sentirlo a creerlo?

¿Cuántas veces tienes que dejar que un amor te lastime para que entiendas, que es un amor que no te pertenece, que no te ama lo suficiente?

¿Cuantas veces tienes que dejar ir a una persona, par que entienda que lo dejas ir por que lo amas demasiado? Que si no fuese así no te importaría tenerlo cerca y su indiferencia no te haría daño.

Mi corazón esta cansado o molesto, se acaba de saltar un latido y me ahogue yo misma con saliva, pensando en todas las cosas que hacemos por amor y que nunca no son suficientes.

¿Rendirse por amor? o ¿dispuesto a todo por tú amor?

¿Que hice yo?, prepare mis maletas y me fui de viaje tres meses. ¿Qué en que estaba pensando? Yo no estaba pensando, estaba sintiendo con el corazón.

Para sentirlo, para darle lo que desea, para buscarlo, para encontrarlo, para acercarme a él, para hacérselo saber, para no dejar pasar la oportunidad, para no arrepentirme luego por lo que no dije o hice o deje de hacer por amor. Para escribirlo, para abrazarlo muy fuerte, para ver en sus ojos, para encontrar la verdad, para tomar su mano, para sentir su olor, para despedirme de él y…, podría continuar, pero mi corazón se salto un latido. ¡Estaba pensando en las cosas que hacemos por amor!

De viaje con el amor, descubrí que la felicidad esta en mi corazón, que para amar tienes que perdonar, hacer borrón y cuenta nueva, tienes que cambiar primero tu forma de ver la vida y ver la vida con los ojos de la persona que amas, aunque sea por un instante, así perdonas sus errores y sus fallas. Para amar tienes que aceptar a las personas como son, darles lo que te piden, saber escuchar sus necesidades, no negarles el vaso de agua. A mi me esta dando buenos resultados. Estoy cada día perdonándome un poco más a mi misma, por no hacer suficiente por amor. Estoy aprendiendo a dejarme amar, a dejarme sorprender por la vida. Estoy aprendiendo a vivir con los recuerdos que quería olvidar y hacer espacio para nuevos recuerdos. La capacidad de amar también la encontré. Recordé lo que se siente amar y sentirse amado, amar y perder, amar y dejar en libertad para que cada quien siga su camino y se encuentre a si mismo.

Es hora de un cambio, de dejar el pasado a tras, vivir el presente, ser feliz con lo que se tiene, sin dejar de ir en búsqueda de tus sueños. Darse una oportunidad para creer que al amor todo lo puede y que por amor somos capaces de cambiar para mejor.

Llego la hora de hacer las maletas nuevamente, llego la hora de perdonar, amar y dejarse amar.

De viaje con el amor es una historia de búsqueda y de encuentros, que deseo de corazón te ayude a encontrar tu felicidad.

¡Feliz Viaje!

Lecherías, Venezuela 26 de febrero 2012